Se ha indicado que los detenidos mantenían vínculos con organismos de inteligencia extranjeros, a pesar de no reconocer este hecho durante los interrogatorios.
De acuerdo con las autoridades, estos individuos establecieron comunicación con una figura pública de la oposición, con el objetivo de llevar a cabo acciones violentas. Durante las conversaciones, se mencionó la planificación de diferentes actos delictivos, incluyendo uno dirigido contra una autoridad local.
Además de estos eventos, se ha anunciado la desarticulación de un grupo de personas que se presume estaban involucradas en actividades para perturbar la paz y el orden público, presuntamente bajo la dirección de una líder opositora reconocida.
Las autoridades han señalado la posible participación de organismos de inteligencia extranjeros en esta operación, con la supuesta intención de utilizar agentes foráneos para desestabilizar la nación.
En este sentido, se ha mencionado la interceptación de un arsenal de armas que se encontraba en posesión de grupos delictivos con el fin de fomentar la violencia y promover la inestabilidad. Entre los implicados, se identificó a expertos en operaciones especiales de una nación extranjera, quienes habrían sido contratados para llevar a cabo dichos actos ilícitos.
Se ha alertado sobre la participación de figuras importantes de la oposición en estos sucesos, asegurando que se tomarán las acciones necesarias para garantizar la seguridad y la estabilidad del país.
Por último, se ha revelado que algunos de los detenidos poseían material bélico para ejecutar planes que ponían en riesgo la tranquilidad de la nación, incluyendo individuos de nacionalidad estadounidense.