Venezolanos en el extranjero luchan por participar en elecciones presidenciales

Debido a obstáculos gubernamentales, pocos venezolanos en el exterior podrán ejercer su derecho al voto

La población de Venezuela es de alrededor de 29,4 millones de habitantes, de los cuales 21,4 millones podrían participar en las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio, tanto en el país como en el extranjero.

Sin embargo, debido a los requisitos impuestos por el Gobierno para el registro electoral fuera de Venezuela, solo 69,211 venezolanos en el exterior tienen la posibilidad de votar. Esta cantidad representa una pequeña fracción de los cerca de ocho millones de venezolanos que han emigrado, según informes de la ONU.

En Colombia, aproximadamente tres millones de venezolanos han encontrado refugio, convirtiendo al país en uno de los que más ciudadanos de ese origen han acogido, debido a la crisis en Venezuela.

Por otro lado, España destaca como el país europeo que alberga a un gran número de migrantes venezolanos, incluyendo a líderes opositores que han abandonado Venezuela en los últimos años, como Dinorah Figuera, Antonio Ledezma, Diego Arria y Leopoldo López.

La posible manipulación de los resultados electorales es motivo de preocupación, ya que la oposición teme que Maduro no reconozca los resultados o los altere, dadas las controversias sobre fraudes electorales en el pasado.

En Brasil, los venezolanos enfrentan dificultades para participar en el proceso electoral, ya que solo pudieron registrarse en la Embajada en Brasilia y en el Consulado General de São Paulo. En Perú, la mayoría no pudo inscribirse debido a las restricciones impuestas por las autoridades locales.

El Consulado venezolano en Buenos Aires abrirá sus puertas el próximo 28 de julio para facilitar el voto, acompañado de una feria migrante y la presencia de líderes argentinos que han contribuido en la búsqueda de la libertad en Venezuela.

En Italia, los consulados han establecido requisitos que dificultan el voto de muchos venezolanos residentes en el país, lo que genera inquietud en la comunidad italovenezolana.