La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha solicitado al Gobierno ecuatoriano que asegure la independencia de quienes trabajan en el ámbito judicial, protegiendo su labor y seguridad, especialmente en casos de corrupción que implican a miembros del sistema judicial.
Según la CIDH, diferentes investigaciones han revelado posibles casos de corrupción y cooptación de jueces por parte de organizaciones criminales, lo que pone en peligro la autonomía del sistema de justicia.
Para hacer frente a esta situación, se plantea la implementación de estrategias que protejan a los operadores judiciales y fiscales, garantizando la imparcialidad en los procesos legales y combatiendo la influencia del crimen organizado en la justicia.
La Comisión reconoce los esfuerzos del Gobierno ecuatoriano en la lucha contra la corrupción y resalta la importancia de mantener la independencia judicial ante posibles presiones externas. Se hace un llamado a fortalecer las medidas de protección para el personal judicial y a llevar a cabo investigaciones exhaustivas para sancionar a quienes perpetren actos de violencia contra los actores de la justicia.