Un total de siete naciones han logrado mantener niveles de calidad del aire que cumplen con los estándares recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), manteniendo bajos los niveles de partículas suspendidas.
Se destaca la importancia de seguir el ejemplo de estos países, adoptando medidas urgentes para proteger la salud de la población y conservar el medioambiente para las generaciones venideras.
Los países que han logrado cumplir con los estándares de calidad del aire de la OMS son los siguientes:
Las políticas ambientales a nivel nacional y regional han permitido a Australia mantener la calidad del aire dentro de los estándares recomendados. La integración de tecnologías en el transporte para reducir las emisiones ha sido clave en este logro.
Estonia ha mejorado la calidad del aire a través de políticas urbanas enfocadas en la reducción de emisiones y la promoción de la biodiversidad.
Finlandia ha dado prioridad a las energías renovables y al transporte público sostenible, abordando los desafíos estacionales con una planificación cuidadosa y políticas integradas.
Islandia ha sabido aprovechar los recursos naturales, como la energía geotérmica e hidroeléctrica, manteniendo bajos niveles de contaminación en todo su territorio.
Nueva Zelanda ha logrado asegurar un aire limpio mediante el uso de tecnologías limpias y estrictas regulaciones para las emisiones industriales y vehiculares, especialmente en zonas urbanas.
Las políticas de Mauricio promueven el uso de fuentes de energía renovables y regulaciones estrictas para reducir las emisiones, mejorando así los estándares de calidad del aire.
La Isla de Granada ha implementado estrategias sólidas para proteger el medioambiente y la salud pública, regulando sectores clave para mantener niveles seguros de contaminación atmosférica.