Una serie de sanciones han sido aplicadas por Estados Unidos a 16 funcionarios de Venezuela, abarcando figuras del Consejo Nacional Electoral (CNE), el Tribunal Supremo de Justicia y la Asamblea Nacional. Estas medidas responden al señalamiento de la proclamación "falsa" de la victoria de Nicolás Maduro en los comicios presidenciales de julio.
Entre los sancionados además de Caryslia Rodríguez, presidenta del Tribunal Supremo, figuran Antonio José Meneses, secretario general del CNE, y Pedro Infante Aparicio, vicepresidente de la Asamblea Nacional.
Declara Antony Blinken, secretario de Estado, que las sanciones se justifican en las proclamaciones engañosas de Maduro y su entorno, quienes han ejercido represión sobre la oposición democrática para mantenerse en el poder. El Departamento del Tesoro ha emitido sanciones financieras a estos individuos, culpándolos de interferir en un proceso electoral transparente y la correcta publicación de resultados.
Asimismo, el Departamento de Estado ha establecido restricciones de entrada a funcionarios vinculados con Maduro que han afectado el proceso electoral y han cometido actos represivos. Estas sanciones se suman a las 140 aplicadas previamente por el Tesoro estadounidense a funcionarios venezolanos, y más de 2 000 individuos bajo restricciones de visado por parte del Departamento de Estado.
Estados Unidos continuará demandando responsabilidad a aquellos que atenten contra la democracia en Venezuela según Blinken. La oposición ha respaldado la victoria de Edmundo González Urrutia en las elecciones de julio, aunque el CNE haya declarado la reelección de Maduro sin mostrar las actas de votación. González Urrutia, quien ha buscado asilo en España, ha sido un protagonista de relevancia en este proceso.