Mediante una propuesta liderada por la asambleísta Paola Cabezas y respaldada por un grupo de parlamentarios, se busca destacar el papel fundamental de estas mujeres en la sociedad y garantizar sus derechos colectivos.
Se hace un llamado al Estado para establecer normativas que aseguren estos derechos y se insta al Gobierno a cumplir con la Agenda de la Igualdad para el Decenio Afrodescendiente, centrada en el reconocimiento, la justicia y el desarrollo.
Importantes activistas afrodescendientes como Inés Morales, Irma Bautista, Sonia Vivero y Epsy Campbell han abogado por la oficialización de esta fecha como una oportunidad para reivindicar sus derechos y combatir la discriminación.
Según datos del Consejo Nacional para la Igualdad de Género, en Ecuador aproximadamente el 7% de las mujeres se identifica como afrodescendiente, lo que equivale a 511,407 mujeres. Sin embargo, enfrentan desafíos significativos, con un 18.4% viviendo en condiciones de pobreza extrema.
En el marco de esta fecha, la Fundación Aldea destaca la relevante labor de las mujeres afrodescendientes a lo largo de la historia ecuatoriana.
Figuras como María del Tránsito Sorroza, Bernarda Loango Grijalba, Martina Carrillo y María Chiquinquirá Díaz han dejado un legado invaluable, luchando por la libertad y los derechos de sus comunidades en distintas épocas.
Entre las destacadas se encuentran Petita Palma, Irma Bautista, Mónica Chalá y Neisi Dajomes, cuyo aporte ha sido fundamental en la lucha por los derechos de las afrodescendientes en el país.