El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, hace referencia a sus comentarios anteriores sobre un posible escenario de violencia en caso de no resultar ganador en las elecciones presidenciales próximas.
Maduro destaca que sus palabras fueron una reflexión y sugiere a aquellos preocupados por sus declaraciones que mantengan la calma.
"No he mentido, solo he reflexionado; quienes se alarmaron deberían relajarse. Este pueblo venezolano está preparado y entiende mis palabras. En Venezuela, la paz y el poder popular prevalecerán", expresó el líder durante un acto de campaña.
Frente a las inquietudes planteadas por Lula da Silva, mandatario de Brasil, Nicolás Maduro reitera que sus comentarios buscan fomentar la tranquilidad en el país, no generar temores.
Lula da Silva ha subrayado la relevancia de respetar los procesos democráticos para mantener la estabilidad en Venezuela, haciendo énfasis en que en democracia "el perdedor se lleva un voto de humildad, no un baño de sangre". Además, insta a Maduro a aceptar los resultados electorales de forma pacífica y prepararse para futuros sufragios.
El presidente Maduro asegura haber prevenido diversos escenarios que podrían haber desencadenado una confrontación interna en Venezuela.
Haciendo referencia a episodios pasados como el "Caracazo" en 1989, Maduro recalca la importancia de mantener la estabilidad en el país y evitar posibles enfrentamientos violentos. El "Caracazo" fue un periodo de protestas y tumultos que tuvieron lugar en Venezuela a raíz de medidas impopulares tomadas por el gobierno en aquel entonces.
Brasil enviará observadores electorales a Venezuela para los comicios presidenciales, reafirmando el interés internacional en el progreso democrático del país.