Organizaciones reportan más de 1,500 arrestos tras elecciones en Venezuela, generando controversia por los resultados obtenidos en el proceso electoral.
Según informes, se han detenido venezolanos de diversas edades y condiciones, incluyendo adolescentes, indígenas, personas con discapacidades y mujeres, tras las protestas post-electorales.
El Gobierno anuncia un número mayor de detenidos, así como lamenta pérdidas humanas durante los disturbios.
Familiares y organizaciones instan a respetar los derechos de los arrestados, a quienes se les acusa de delitos graves sin la posibilidad de acceder a una defensa justa.
Las autoridades responsabilizan a la oposición de actos de violencia y daños a la propiedad pública durante las manifestaciones.
La situación en Venezuela genera un llamado global a la protesta pacífica, liderado por figuras reconocidas, buscando atención para la crisis política y social que atraviesa el país.