En la ciudad, el número de animales sin hogar supera notablemente el promedio recomendado, con un canino por cada 19 residentes, según datos de la Unidad de Bienestar Animal (UBA) hasta noviembre de 2023.
La ausencia de esterilización en muchos de estos animales abandonados se considera como una infracción de gravedad según lo establecido en la Normativa Metropolitana No. 019-2020.
La no realización del proceso de esterilización o castración en los animales de compañía será considerada como una falta grave, con posibles multas económicas o servicios comunitarios para los infractores.
Las reiteradas transgresiones serán abordadas con mayor rigurosidad según lo dispuesto en la legislación actual.
La normativa local establece penalizaciones económicas y registros legales para aquellos que cometan faltas graves en este aspecto.
Además de ayudar a controlar la población de animales sin hogar, la esterilización contribuye a prevenir enfermedades graves y a prolongar la vida de las mascotas. También reduce el riesgo de complicaciones durante el parto y padecimientos relacionados con los órganos reproductivos.
Diversas organizaciones de veterinarios respaldan la necesidad de esterilizar tempranamente a los felinos, sugiriendo llevar a cabo el procedimiento antes de los cinco meses de edad. Con respecto a los caninos, no hay una recomendación universal, dependiendo de las circunstancias específicas de cada mascota.