El ataque perpetrado el pasado domingo 26 de mayo de 2024 en Rafah, que provocó la muerte de al menos 46 personas, incluidos mujeres, niños y ancianos, ha sido calificado como "indiscriminado y desproporcionado" por expertos de la ONU. Estos señalaron que Israel no puede eludir su responsabilidad en estos crímenes alegando que se trató de un error.
La ONU ha denunciado que atacar zonas donde se refugian civiles palestinos vulnerables constituye una grave violación de las leyes de la guerra. Los expertos han instado a que la comunidad internacional intervenga y se exijan responsabilidades por estos hechos.
Asimismo, se ha demandado una investigación internacional e independiente sobre los ataques en Rafah, que se han cobrado la vida de varios palestinos inocentes. Los expertos han destacado la necesidad de detener de inmediato el flujo de armas hacia Israel, argumentando que estas armas están siendo utilizadas de manera cruel contra la población civil palestina.
Entre los firmantes de este comunicado se encuentran la relatora de la ONU para Palestina, Francesca Albanese, y la experta en derechos de los desplazados internos, Paula Gaviria.