La CorteIDH ha iniciado sus sesiones en la ciudad de Manaos, Brasil, para abordar la problemática de la crisis climática y la responsabilidad estatal al respecto.
Chile y Colombia han solicitado una opinión consultiva sobre la respuesta a la emergencia climática desde la óptica de los derechos humanos.
Las audiencias se llevan a cabo en el Teatro Amazonas, destacando las dificultades de las víctimas de desastres ambientales para acceder a la justicia.
Se destaca la desigualdad en los litigios ambientales que suelen involucrar a comunidades vulnerables con Estados o empresas multinacionales.
Se hace hincapié en la falta de conocimiento ambiental de jueces y abogados, sugiriendo programas de formación en temas climáticos.
La Asociación Ambiente y Sociedad de Colombia pide mayor protección para los defensores del medio ambiente y aborda la crisis global de cambio climático, biodiversidad y contaminación en el país.
El conflicto interno en Colombia dificulta la protección del entorno, representando un riesgo para las poblaciones campesinas e indígenas.
Estas sesiones en Manaos continúan un debate iniciado en abril en Barbados y retomado la semana pasada en Brasilia, como parte del 167º período de sesiones del tribunal interamericano.