Kamala Harris se enfrenta a uno de los mayores desafíos en su trayectoria política en el estado de Pensilvania. A pesar de haber generado entusiasmo entre diferentes grupos de votantes, necesita conquistar el apoyo de la clase trabajadora blanca en este estado para asegurar su éxito.
El estado de Pensilvania cobra especial relevancia durante la Convención Nacional Demócrata celebrada en Chicago esta semana. Kamala Harris pronunciará un discurso el jueves para oficializar su candidatura demócrata en las elecciones de noviembre.
El respaldo del gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, resulta fundamental para el éxito de Harris en el estado. Shapiro ha destacado la importancia de Pensilvania en esta contienda electoral y la ajustada competencia que se vive.
Por otro lado, Donald Trump también está intensificando sus esfuerzos para ganar votos en Pensilvania. Su campaña se encuentra en pleno apogeo, con eventos multitudinarios y una intensa labor propagandística.
Los últimos sondeos muestran un empate entre Trump y Harris en Pensilvania, así como en otros estados clave como Wisconsin y Míchigan.