José Raúl Mulino, quien se considera el sucesor político del expresidente Ricardo Martinelli, fue electo como presidente de Panamá el 5 de mayo de 2024. Obtuvo una gran ventaja sobre sus oponentes directos, quienes vieron divididos sus votos mientras Mulino prometía mejorar la economía y el bienestar de los panameños.
Con más del 87 % de los votos contabilizados, Mulino logró un 34,4 % de las papeletas, superando a Ricardo Lombana, Martín Torrijos y Rómulo Roux.
Caracterizado por ser un hombre de pocas palabras, pero firme en sus decisiones, el nuevo presidente se compromete a impulsar el crecimiento económico y mejorar la situación financiera de la población.
A pesar de las acusaciones de corrupción que rodean a Martinelli, durante su mandato Panamá experimentó un notable crecimiento económico y la construcción del primer Metro en Centroamérica.
Como proyecto destacado, se plantea la creación del “Tren la locura para ir a balazo”, que conectaría Ciudad de Panamá con la provincia de Chiriquí, buscando potenciar el turismo y la logística.
Mulino, abogado y exministro en diversas carteras, se graduó en Derecho y Ciencias Políticas en la Universidad Santa María La Antigua y realizó una maestría en Derecho Marítimo en Tulane University.
Fungió como viceministro de Relaciones Exteriores en el Gobierno de Guillermo Endara y ha tenido roles clave en la política panameña, incluyendo su participación en la caída del general Noriega.
Además, está casado desde 1985 con Maricel Cohen, con quien tiene cuatro hijos y cuatro nietos.
Bajo la administración de Martinelli, Mulino ocupó cargos de ministro en áreas como Gobierno e Justicia y Seguridad Pública. Su gestión estuvo marcada por controversias, como la represión de protestas en 2010.
Durante el gobierno de Juan Carlos Varela, Mulino enfrentó acusaciones de corrupción relacionadas con la empresa Finmeccanica, por las cuales estuvo detenido preventivamente. Estas acusaciones fueron anuladas en 2017.