Tras consultar con juristas, se llegó a la conclusión de que cualquier medida disciplinaria sería dirigida únicamente hacia el jugador y no hacia el club, de acuerdo a las normativas de la FEF. La documentación presentada por Bolaños fue emitida por organismos gubernamentales, lo que sugiere que el equipo actuó de manera ética en todo el proceso.
Los especialistas aseguran que Independiente del Valle no enfrenta ningún tipo de sanción, ya que solicitaron certificaciones a diversas entidades para respaldar la idoneidad del jugador. Además, el club ha cooperado activamente con las investigaciones en curso.
En relación a la posible sanción para Alexander Bolaños, se estima que podría recibir una suspensión de entre seis meses y dos años, dependiendo de las circunstancias particulares del caso.
El incidente salió a la luz el 9 de abril de 2024 y desde entonces se han llevado a cabo investigaciones para esclarecer la situación. Independiente del Valle ha tomado medidas para apartar al jugador del equipo mientras se resuelve la controversia.