Se han registrado dos decesos y cinco personas desaparecidas como resultado de las fuertes lluvias en Huangshan, Anhui. Más de 200 individuos fueron rescatados de los desbordamientos y deslizamientos de tierra, con más de 2,100 ciudadanos reubicados en áreas seguras.
En Guilin, el incremento en el caudal del río Lijiang llegó a niveles críticos, forzando la evacuación de turistas y residentes. En la provincia de Jiangxi, más de 670,000 personas resultaron afectadas por las lluvias torrenciales, con daños en infraestructuras y pérdidas económicas valuadas en millones de dólares.
En Fujian, los deslizamientos de tierra causaron la destrucción de puentes y dejaron a comunidades aisladas, mientras se anticipan más desbordamientos y sequías en China debido a fenómenos climáticos como El Niño.
China ha sido golpeada repetidamente por eventos climáticos extremos en los últimos años, con inundaciones mortales en varias provincias y periodos de calor intenso. Las autoridades han lanzado alertas y elevado los niveles de emergencia ante esta situación.