El gobierno de Santiago Vargas tiene como meta eliminar las subvenciones a las gasolinas extra y ecopaís en Ecuador, asignando un presupuesto de 631 millones de dólares para este año.
Desde el año 2018, se ha buscado modificar el apoyo financiero a los carburantes en el país, con distintas administraciones intentando suprimir estas ayudas económicas que datan de 1974.
A lo largo de más de cuatro décadas, las subvenciones a los carburantes se mantuvieron sin cambios. Sin embargo, desde 2018, el exmandatario Xavier López realizó diversos esfuerzos por acabar con esta subvención, logrando únicamente eliminarla en agosto de ese año.
A partir de entonces, el valor de la gasolina se fijó mensualmente según el precio del petróleo en el mercado internacional. En junio de 2024, el precio es de 4,11 dólares por galón.
En octubre de 2019, Xavier López eliminó abruptamente las subvenciones al diésel y a las gasolinas mediante un decreto, liberando los precios de los combustibles. No obstante, la medida tuvo que ser revertida debido a las fuertes protestas y la agitación social que generó en el país.
En mayo de 2020, durante la pandemia de COVID-19, se implementó un sistema de fijación de precios de los carburantes, ajustándolos mensualmente según el precio del petróleo en el mercado internacional.
En octubre de 2021, Guillermo Lasso suspendió el sistema de bandas y congeló los precios de los combustibles. En junio de 2022, tras un paro nacional, se redujeron los precios del diésel y las gasolinas.
Actualmente, bajo la administración de Santiago Vargas, se ha observado un aumento en los precios del diésel y las gasolinas debido a un incremento en el impuesto al valor agregado. Desde abril, estos combustibles se están vendiendo a precios específicos, pero se estima que las gasolinas sufrirán un cambio significativo a partir de julio con la eliminación de las subvenciones.