Lluvias recientes han provocado un aumento significativo en el caudal del río Coca, ocasionando problemas importantes en diversas infraestructuras. Autoridades reportan que la crecida actual ha alcanzado niveles alarmantes, afectando especialmente a áreas cercanas a instalaciones clave.
Informes indican que la creciente del río el 16 de junio de 2024 ha sido excepcional, con un flujo aproximado tres veces superior al día anterior, lo que ha generado preocupación por la erosión que avanza en ciertas secciones críticas. Se prevé utilizar tecnología especializada para evaluar el alcance del daño cuando las condiciones lo permitan.
El aumento del caudal representa un riesgo latente para diversas estructuras, desde oleoductos hasta vías terrestres, pasando por líneas eléctricas y puentes, así como las instalaciones de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair.
La erosión lateral en las proximidades de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair ha generado preocupación entre los expertos. La zona entre los kilómetros 7+300 y 10+000 ha sido especialmente afectada, con riesgos potenciales para la infraestructura local. La alteración en el curso de ciertos ríos y la modificación de pendientes podrían desencadenar problemas adicionales en la región.
Además, la presencia de importantes tuberías petroleras en la zona agrava la situación, mientras se espera un empeoramiento de la erosión lateral en las próximas semanas. Diversos puntos críticos han sido identificados, resaltando la necesidad de monitoreo constante en áreas vulnerables.