Un estudio llevado a cabo por investigadores del Instituto de Biología y Medicina Experimental (Ibyme) en Argentina ha arrojado luz sobre la influencia del cambio ambiental en la capacidad reproductiva masculina. Tras analizar una amplia muestra de semen proveniente de 54,907 hombres de diferentes edades entre 18 y 60 años en Buenos Aires durante casi dos décadas, los resultados indicaron que las altas temperaturas pueden reducir la movilidad de los espermatozoides en un 10% y afectar la morfología de los mismos.
La investigadora principal del Laboratorio de Estudios de Interacción Celular en Reproducción y Cáncer del Ibyme, Mónica Vazquez-Levin, destacó la importancia de considerar el impacto de las altas temperaturas al intentar concebir un hijo.
Investigaciones previas, tanto a nivel nacional como internacional, han confirmado que las condiciones térmicas extremas pueden repercutir en la calidad del esperma y disminuir las probabilidades de fecundación. Recomendaciones como evitar prendas ajustadas y la exposición prolongada a elevadas temperaturas en spas o saunas son fundamentales para preservar la capacidad reproductiva masculina.
"Uno de los efectos del aumento de las temperaturas es la generación de un estado inflamatorio que resulta perjudicial para el núcleo de los espermatozoides y las células germinales testiculares", explicó Gustavo Verón, experto en el campo de estudio.
Los investigadores identificaron el momento durante el proceso de espermatogénesis en el que la exposición a altas temperaturas tiene un mayor impacto, subrayando la necesidad de velar por la salud reproductiva masculina en el contexto actual de cambio ambiental.