Hoy se conmemora un día especial para los amantes de la música y el deporte, ya que recordamos el legado de Los Beatles y su conexión única con el fútbol.
En la vibrante ciudad de Liverpool, Los Beatles nacieron en 1962, marcando una era musical que impactaría no solo en la cultura, sino también en el ámbito deportivo, especialmente en el fútbol.
La influencia cultural de la banda se reflejó en los estadios de fútbol, donde sus canciones se convirtieron en himnos seguidos y entonados por aficionados de diferentes equipos alrededor del mundo.
Paul McCartney, reconocido por su talento musical, también es un apasionado seguidor del Everton, mostrando su lealtad en diversos eventos y colaboraciones con el club a lo largo de los años.
Otro aficionado declarado del Everton es Ringo Starr, quien comparte su pasión por el equipo y ha disfrutado de partidos en el estadio Goodison Park, recordando sus raíces futbolísticas en Liverpool.
John Lennon y George Harrison, aunque menos involucrados en el fútbol, también tuvieron sus momentos de conexión con el deporte, participando en eventos y compartiendo experiencias relacionadas con equipos locales.
Harrison, a pesar de no mostrar particular interés en el deporte, mantenía un lazo sentimental a través de su familia y la afición de su padre por el equipo de Liverpool.
George Best, reconocido como un ícono del fútbol británico, fue denominado cariñosamente como 'El Quinto Beatle' debido a su impacto en la cultura popular durante la época de la 'Beatlemania'. Su talento en el campo y su estilo único lo destacaron, siendo comparado con la esencia innovadora de Los Beatles.
Su legado y contribución al deporte lo han inmortalizado como una figura emblemática que trasciende generaciones, al igual que la influencia perdurable de Los Beatles en la historia.