El huracán Nombra ocasiona abundantes precipitaciones en un sector este de los EE.UU. Movilizándose con ráfagas de aire de 110 km/h y lamentablemente ha cobrado una vida.
Con base en la Oficina del Alguacil del distrito de Levy, el fallecimiento tuvo lugar a causa de la caída de una rama mientras la tormenta transitaba por Fanning Springs.
Nombra tocó suelo como huracán de categoría 1 en Steinhatchee, Florida. Autoridades locales han decretado el estado de emergencia ante el ciclón que ahora ha sido catalogado como tormenta tropical.
El Centro Nacional de Huracanes de los EE.UU. informa que Nombra avanza hacia el nororiente a 13 km/h, situación que extenderá las condiciones de tormenta y se prevén precipitaciones intensas en la región.
El mandatario de Florida, Ron DeSantis, alerta sobre la acumulación de agua y los efectos duraderos del huracán en la región.
Se augura una inundación costera susceptible de elevar el nivel del mar en Florida. Millones de habitantes en Tampa y localidades litorales permanecen alerta ante posibles anegamientos.
Cerca de 250,000 hogares y establecimientos en Florida están sin energía eléctrica. Terminales aéreas como la de Tallahassee se mantienen cerradas y se han registrado cancelaciones y demoras en vuelos en Orlando y Tampa.
En Georgia y Carolina del Sur se temen inundaciones de proporciones catastróficas, con interrupciones en el servicio de electricidad y medidas de precaución adoptadas por las autoridades locales.
Nombra representa el segundo huracán de la temporada en Estados Unidos después de Beryl. Se proyecta que esta temporada sea una de las más activas e intensas en décadas, con el desarrollo de hasta 25 tormentas y 13 huracanes.