Un ciudadano ecuatoriano llamado Nelson Serrano, quien decidió emigrar a Estados Unidos en busca de nuevas oportunidades, se vio envuelto en un enredado caso legal que despertó un gran revuelo mediático. En el año 1997, fue acusado de estar involucrado en un incidente en Bartow, Florida, que resultó en la trágica muerte de cuatro personas.
A lo largo de los años, Serrano mantuvo su inocencia y su equipo legal presentó pruebas que cuestionaban la veracidad de las acusaciones en su contra. Surgieron nuevos detalles, como la posible existencia de una tercera arma en la escena del crimen y testimonios que insinuaban la posible participación de terceros desconocidos.
Después de un largo proceso judicial, Nelson Serrano recibió la sentencia de muerte en el 2007. No obstante, su defensa argumentó que su traslado desde Ecuador en el 2002 fue irregular y que durante su juicio en EE.UU. se cometieron graves violaciones a sus derechos humanos.
Ante esta situación, la familia de Serrano solicitó la intervención del Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador para llevar el caso ante la Corte Internacional de Justicia en La Haya, destacando las supuestas infracciones a tratados internacionales y a la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.
Tras permanecer en el corredor de la muerte en Florida desde el año 2007, Nelson Serrano falleció el 7 de agosto, afrontando difíciles condiciones de reclusión y aislamiento. Su hijo, Francisco Serrano, comunicó que su padre había librado una dura batalla contra un tumor cerebral que lo mantenía al borde de la inconsciencia.
El deceso de Nelson Serrano tuvo lugar el 7 de agosto después de permanecer ingresado en un hospital de Florida durante varios días. La noticia fue confirmada por su abogado, Óscar Vela, quien a través de un mensaje en plataformas digitales lamentó la pérdida y reafirmó su compromiso de demostrar la inocencia de su cliente.
Nelson Serrano nos ha dejado tras un devastador suceso ocurrido en el Hospital de Jacksonville. Ahora reposa en libertad, pero nuestro deber es seguir luchando por su honor.
— Óscar Vela (@oscarvelad) Agosto 8, 2024