El partido gubernamental Acción Democrática Nacional (ADN) decidió expulsar a una de sus representantes el 14 de agosto de 2024, reestructurando su presencia en la Asamblea Nacional.
Con esta salida, la bancada oficialista contará con 35 votos fijos en el órgano legislativo, generando un cambio en la configuración parlamentaria.
A pesar de los esfuerzos de ADN por consolidar su presencia, la asambleísta María Fernanda Araujo, proveniente de Chimborazo, fue separada del partido político.
Araujo ha denunciado irregularidades éticas y casos de corrupción en la gestión del Gobierno de Daniel Noboa, señalando a distintas personalidades como el gobernador de Chimborazo, Guido Puyol, y poniendo en duda prácticas de nepotismo en la administración estatal.
Ante estas acusaciones, ADN emitió un comunicado oficial explicando que la expulsión de Araujo se debió a su postura crítica hacia el gobierno, contraria a los valores del partido.
Como acción disciplinaria, se le prohibió a la asambleísta identificarse como integrante de ADN en eventos tanto públicos como privados, marcando un giro en la vinculación entre política y ética en Ecuador.