El Servicio de Rentas Internas (SRI) considera como contribuyentes a todas las entidades o individuos que desarrollan actividades económicas en Ecuador de forma legal.
Es esencial que estos contribuyentes cumplan con todas las obligaciones fiscales correspondientes y realicen el pago de impuestos en el país.
El SRI divide a los contribuyentes en dos grupos principales: personas naturales y personas jurídicas.
Este grupo abarca a individuos, tanto ecuatorianos como extranjeros, que llevan a cabo actividades económicas, con o sin la obligación de mantener registros contables.
Las personas naturales están sujetas a impuestos sobre la renta personal, bienes, herencias, donaciones, entre otros conceptos impositivos.
Dentro de esta categoría, se encuentran empleados, trabajadores autónomos, profesionales independientes y otros individuos que generan ingresos por su cuenta.
Las personas naturales pueden optar por declarar impuestos bajo el Régimen General o el Régimen Simplificado para Emprendedores y Negocios Populares (Rimpe).
Este grupo está conformado por entidades legales como sociedades, organizaciones del sector público, compañías anónimas, entidades con economía mixta, entre otras.
En esta clasificación se incluyen bancos, cooperativas, empresas con fines de lucro, entidades deportivas, embajadas, entre otros tipos de instituciones.