Un equipo de arqueólogos egipcios e italianos ha realizado un descubrimiento significativo en la región sur de Egipto al encontrar un total de 33 tumbas que albergan los restos de individuos, tanto adultos como niños, que perdieron la vida hace más de 2 mil años a causa de diversas enfermedades, como la anemia y la tuberculosis, según han informado las autoridades del Ministerio de Antigüedades de Egipto.
El hallazgo tuvo lugar en el área de Agajan, situada al oeste de la ciudad sureña de Asuán, y los restos pertenecen a dos períodos distintos de la historia egipcia: el periodo tardío de Egipto (664 a.C. - 332 a.C.) y la época grecorromana (332 a.C. - siglo IV d.C.).
Los primeros análisis realizados en las momias sugieren que entre el 30 y el 40 % de los individuos enterrados eran jóvenes, adolescentes e incluso bebés, quienes fueron sepultados junto a múltiples objetos funerarios en tumbas que han resistido el paso del tiempo hasta la actualidad.
Este descubrimiento arqueológico brindará nuevos datos acerca de la vida en esa época y las enfermedades que afectaban a la población en ese entonces. Además, se ha señalado la posible existencia de más momias enterradas en la misma zona donde se llevó a cabo este importante hallazgo.
Patricia Piacentini, la líder de la expedición de origen italiano, ha manifestado que los primeros estudios indican que gran parte de las personas fallecidas eran individuos jóvenes, adolescentes o recién nacidos. Algunas de estas momias presentan signos de enfermedades contagiosas y malformaciones óseas, como evidencian las caderas de ciertas mujeres adultas. Además, se han identificado indicios de anemia, desnutrición, enfermedades respiratorias, tuberculosis y osteoporosis en otras momias encontradas en el lugar.