Un grupo de trabajadores del sector de energía y petróleo han manifestado su discrepancia con las afirmaciones del ministro de Economía y Finanzas, Juan Carlos Vega, acerca de la conveniencia de importar combustible en lugar de producirlo internamente.
De acuerdo con las declaraciones, importar gasolinas sería más económico que su procesamiento local, en respuesta a esto, los trabajadores petroleros han emitido un comunicado indicando que la importación no resulta beneficioso económicamente, haciéndose eco de la presencia de refinerías en otros países a nivel mundial.
Según datos proporcionados por Petroecuador, en el año 2023, un 36,5% de los combustibles consumidos en Ecuador fueron producidos localmente, mientras que el 63,5% fue importado. Los trabajadores han calculado que importar ese 36,5% producido internamente habría tenido un costo de 3 922 millones de dólares, más del doble del costo real de producción en refinerías del país (1 424 millones de dólares).
Asimismo, desde la Asociación Nacional de Trabajadores de las Empresas de la Energía y el Petróleo se ha hecho hincapié en la importancia de no solo centrarse en la producción de diésel, sino también en la de gasolinas durante el proceso de refinación. Se destaca que dicho proceso implica la obtención de diversos subproductos como las naftas, cuya gestión también debe ser tenida en cuenta.