Daniel Pintado cumple una promesa conmovedora con su madre después de los Juegos Olímpicos

Daniel Pintado, quien obtuvo medallas de oro y plata en los Juegos Olímpicos de París 2024, realizó un gesto emocionante al regresar a Cuenca y cumplir una promesa largamente esperada con su madre.

Daniel Pintado ganó medallas de oro y plata en los Juegos Olímpicos de París 2024 y, al regresar a Ecuador, decidió cumplir una promesa significativa con su madre. Tras llegar a su ciudad natal, Cuenca, le entregó su medalla como había prometido desde hace varios años.

El lunes 12 de agosto de 2024, el atleta olímpico aterrizó en Guayaquil y dio sus primeras declaraciones en el país después de su participación en los Juegos Olímpicos. Se tenía previsto que llegara a Cuenca el martes 13 de agosto.

A su llegada a Guayaquil el mismo día que las medallistas Neisi Dajomes y Angie Palacios arribaron a Quito, Daniel Pintado estuvo acompañado por la luchadora Lucía Yépez, quien también obtuvo una medalla de plata.

En Guayaquil, expresó su deseo de regresar a Cuenca y cumplir un sueño personal. "Quiero ver a mis hijos y ponerle la medalla de oro a mi madre, cumplir un sueño que le prometí hace más de 20 años", manifestó.

Daniel Pintado, un hombre de palabra

Al llegar al Aeropuerto de Cuenca, Daniel Pintado se reencontró con su familia que lo esperaba en la pista de aterrizaje. Abrazó a sus hijos frente a sus padres, amigos y medios de comunicación presentes.

El siguiente gesto del medallista fue hacia sus padres. Todo lo que había mencionado anteriormente se hizo realidad. Se acercó a su madre y, después de unas palabras, le entregó la medalla de oro.

El momento con su padre fue igualmente emotivo. Colgó la medalla de plata a su papá. Luego, sus dos hijos también lucieron las medallas alrededor de sus cuellos.

Daniel Pintado, con caravana y homenaje tras los Juegos Olímpicos

Desde su llegada al Aeropuerto Mariscal Lamar de Cuenca, se planificaron varios eventos en el itinerario de Daniel Pintado. El marchista se dirigió a un autobús que, en caravana, lo condujo al Estadio Alejandro Serrano Aguielar.

En las calles de la ciudad, recibió las felicidades de sus compatriotas, mientras cantaban y celebraban en un bus de dos pisos. En ese trayecto, contó con la compañía de Andrés Chocho, a quien también le había prometido una de sus medallas y la llevaba puesta.

En el estadio en Cuenca, se reunió una vez más con sus hijos. Allí recordó la celebración que realizó al ganar el oro y resaltó la importancia de su familia en la consecución de sus logros.