En entrevista con Diario EL COMERCIO, Bradley Salazar compartió detalles sobre su preparación para el evento y sus metas a futuro. El piloto, que competirá en la categoría de vehículos tubulares, se está entrenando en Ecuador con la meta de terminar entre los 10 primeros de su categoría en una competencia que ya cuenta con más de 270 inscritos a nivel mundial.
“Será nuestra primera participación en este tipo de terreno o este tipo de carrera, ya que hemos competido en Cross Country, rally rate en el Dakar, pero la Baja es un poco diferente porque no hay tiempos intermedios de descanso o tiempos intermedios de reparación mecánica. Si necesitamos cambiar una llanta, ese tiempo se pierde. Creemos que terminar la carrera sería un logro, ya que hay un alto porcentaje de vehículos que abandonan”, afirmó.
De cara a la Baja 500, Salazar se prepara en Guayas, específicamente en Casas Viejas, recorriendo aproximadamente 80 kilómetros por semana en caminos de segundo y tercer orden hasta Olón.
Los entrenamientos no solo se centran en lo físico y en la conducción, también incluyen aspectos psicológicos, trabajando en equipo con su copiloto. El objetivo es estar mentalmente preparados ante las condiciones extremas que la carrera puede presentar, evitando abandonos.
Para la competencia automovilística, Bradley Salazar correrá con el equipo Lumenia Racing Team y el número 2980 en su vehículo. Su copiloto será Marco Guerrón, de 23 años, con quien ya ha compartido competencias en el pasado.
En 2023, Bradley Salazar participó en el Rally Dakar por primera vez, logrando ubicarse en el puesto 20 en la categoría T3 Prototipo ligero. La Baja 500 es parte de las competencias previas al Dakar 2026, donde espera regresar al torneo.
Anteriormente, estuvo en la Baja Jail de Arabia Saudita y luego competirá en la Baja Dubai en noviembre de 2024. Además, tiene la esperanza de poder participar en Italia en septiembre del mismo año.
“Se necesita mucho trabajo y preparación, al menos dos años de preparación para un Dakar. El 2025 es muy pronto (...) Tendremos que trabajar muy duro para conseguir el presupuesto y competir en 2026. Nuestro principal objetivo es transmitir este mensaje a todos los amantes del deporte (...) Si uno cuenta con el apoyo de quienes realmente se preocupan por los pilotos, se puede llegar lejos, se puede llevar la bandera de Ecuador por todo el mundo. Todo esto lo hacemos por pasión y por contribuir,” concluyó.