Un órgano judicial en la Gran Manzana rechaza el intento del exmandatario de revocar la "orden restringida" que limita sus expresiones en público. Asimismo, esta situación le ha acarreado multas en un proceso legal en Nueva York.
"Tras analizar los argumentos presentados por el solicitante, los consideramos infundados", indica la corte de apelaciones en su resolución.
En el mes de mayo, esta figura política se convirtió en el primer expresidente estadounidense en ser hallado culpable en un proceso penal. El caso se relaciona con 34 acusaciones por delitos serios de alteración de registros comerciales vinculados al pago a una actriz para proteger su carrera presidencial en el año 2016.
La sentencia que recae sobre el exmandatario, inicialmente programada para el mes de julio, se aplaza hasta el 18 de septiembre para que el juez a cargo pueda evaluar si un reciente dictamen de la Corte Suprema de los Estados Unidos podría tener influencia en su condena.
El exmandatario (2017-2021) está bajo una "orden restringida" desde el mes de marzo que le prohíbe hacer comentarios públicos referentes a los jurados, testigos, personal de la corte y fiscales individuales en el caso, excepto el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg.
En el transcurso del juicio, el juez a cargo, Juan Manuel Merchan, ha multado en 10 oportunidades al exmandatario por desobedecer dicha normativa, imponiéndole sanciones económicas y advirtiéndole sobre posibles medidas más severas en caso de reincidencia.
Sin embargo, en el mes de junio, Merchan derogó parcialmente la "orden restringida" en lo que respecta a los jurados y testigos, manteniendo las restricciones en comentarios sobre el personal de la corte, los fiscales y sus allegados.
La vicepresidenta Kamala Harris, posible rival demócrata en los comicios de noviembre, ha utilizado este caso judicial del exmandatario en su campaña, presentándose como una exfiscal que se enfrenta a un "condenado por delitos".