El país registró una disminución significativa en sus exportaciones durante los primeros cinco meses del año actual. De acuerdo con el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), el déficit comercial alcanzó los 400 millones de dólares. Este valor representó un aumento del 804 % en comparación con el mismo período del año anterior, donde el déficit fue de 44 millones de dólares según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el lapso mencionado, las exportaciones bolivianas totalizaron 3 558 millones de dólares, mientras que las importaciones llegaron a los 3 958 millones. Este escenario implicó una caída del 23 % en las exportaciones y del 15 % en las importaciones respecto al año previo.
Destaca que Brasil, China y Japón fueron los principales destinos de exportación para Bolivia, mientras que China, Brasil y Estados Unidos se posicionaron como los principales países proveedores. Se evidenció un saldo positivo de 74 millones de dólares en el comercio con Brasil y déficits con China, Argentina y Estados Unidos, así como superávits con Japón y Emiratos Árabes, entre otros lugares.
La producción de gas natural fue históricamente esencial para la economía del país, aunque ha mostrado un declive en los últimos años. Este fenómeno repercutió en la reducción de los ingresos generados por su comercialización. Las exportaciones de minerales, el sector manufacturero, la extracción de hidrocarburos, la actividad agrícola y la ganadería también influyeron en las cifras del comercio exterior boliviano.