Las intensas precipitaciones que azotaron a varias ciudades de Ecuador provocaron el desborde de ríos y esteros.
Esta situación se vivió en Cuenca y en Francisco de Orellana, donde el agua superó los niveles habituales e inundó calles y viviendas.
La Secretaría de Gestión de Riesgos informó que al menos nueve barrios resultaron afectados por la fuerza del agua.
En estas zonas, las alcantarillas están desbordadas, mientras que lodo y escombros bloquean las vías.
Ante esta emergencia, el Ministerio de Educación decidió suspender las clases presenciales y trasladarlas al formato virtual, garantizando la seguridad de los estudiantes.
Ante la crisis, los coliseos han sido habilitados como albergues temporales para acoger a personas en situación de riesgo o cuyas viviendas ya están inundadas.
Además, el albergue "Paraíso Amazónico" se encuentra activo y disponible para aquellos residentes que lo requieran.