Desde mediados de agosto, el nivel del embalse de Mazar en Ecuador ha experimentado una marcada disminución debido a la escasez de precipitaciones en la región. Actualmente, se encuentra a 35 metros por debajo de su nivel óptimo de funcionamiento.
La cota máxima de 2.153 metros sobre el nivel del mar ha descendido a 2.133 metros, según información de Celec Sur. En los últimos 12 días, la reducción se ha intensificado, registrando un descenso de casi un metro diario.
El embalse de la central Mazar tiene una capacidad de 410 millones de metros cúbicos, sin embargo, la falta de lluvias ha dificultado su recuperación. Asimismo, el caudal que abastece a Mazar también ha disminuido, afectando el funcionamiento de la central de Paute, ubicada río abajo.
La central de Paute, la segunda en potencia instalada en Ecuador, ha visto descender el nivel de su embalse a 1.988 metros sobre el nivel del mar. A pesar de contar con una capacidad de almacenamiento de 110 millones de metros cúbicos, actualmente se sitúa a 13 metros por encima de su cota mínima.
Ante este escenario, ambas instalaciones hidroeléctricas enfrentan un desafío para mantener un suministro continuo de energía en medio de la prolongada sequía que afecta la región del Austro desde hace 57 días.