Una persona denuncia complicaciones al intentar salir del país con su hijo, siendo detenidos en la frontera con otro país antes de ser trasladados a Caracas.
Comenta que durante la detención, fueron sometidos a cierto nivel de intimidación y les confiscaron sus dispositivos electrónicos con información sensible.
Tras un período de separación con su progenitora, el joven expresó su deseo de permanecer con ella.
A pesar de la opinión del menor, las autoridades decidieron que era adecuado que estuviera junto a su padre, sin considerar su punto de vista y procediendo con la separación.
La persona afectada culpa al otro progenitor de cualquier situación desafortunada que pudiera ocurrir, mencionando temor a posibles vínculos delictivos.
En el mes de mayo de 2024, se hizo público que una persona y su hijo solicitaron asistencia al gobierno de Ecuador, decidiendo abandonar por voluntad propia el Consulado en Caracas.