Claudia Sheinbaum, en un encuentro con empresarios, hizo hincapié en que su objetivo no es obtener un poder absoluto. Esto ocurre en el contexto de una reforma judicial que ha generado debate sobre los contrapesos en el poder.
La presidenta electa afirmó que dicha reforma no implica un aumento de autoritarismo ni concentración de poder, sino más bien busca fortalecer la autonomía judicial en el país.
Tras la reciente victoria electoral y la percepción de debilitamiento de contrapesos, se observaron reacciones negativas en los mercados financieros mexicanos.
Sheinbaum argumentó que la elección popular de miembros del Poder Judicial permitirá una mayor independencia para los jueces, magistrados y ministros en la toma de decisiones.
Destacó la importancia de respetar la voluntad expresada en las urnas, enfatizando la apertura al diálogo con todos los sectores involucrados en el proceso de reforma.
El Congreso ha establecido actividades de 'Parlamento abierto' para el análisis de la reforma judicial y otros cambios legales propuestos por la coalición gobernante.
Marcelo Ebrard, ex canciller, adelantó la posibilidad de realizar ajustes mínimos a la polémica reforma del sistema legal en reuniones con legisladores.