El cierre y desmontaje del Bloque 43-ITT en el Yasuní se está realizando conforme a lo establecido por las autoridades ecuatorianas, con el objetivo de finalizar todo el proceso para el año 2029.
El desmantelamiento de la plataforma representa un gran desafío logístico y financiero, con un costo estimado de más de 1 300 millones de dólares. Este proceso involucra apagar y sellar cada uno de los 247 pozos petroleros del bloque, siendo el primero de ellos apagado recientemente.
Se estima que las actividades técnicas relacionadas con el cese anticipado de operaciones superarán los $1.345 millones, abarcando diversas áreas como estudios, desmontaje de infraestructuras, logística, entre otras.
Se prevé el desmontaje de alrededor de 6 000 bienes instalados en el bloque petrolero, con un peso total de aproximadamente 26 700 toneladas métricas. Una vez desmontadas, estas infraestructuras serán transportadas hasta su destino final siguiendo un estricto plan logístico.
Para la movilización terrestre se utilizarán volquetas, mientras que para la movilización fluvial se emplearán gabarras. Ambos procesos requieren un meticuloso plan que asegure la integridad de las estructuras desmontadas y su llegada segura a los puntos de embarque designados.
El cierre del primer pozo petrolero en el Bloque 43-ITT, realizado en agosto de 2024, marca el inicio de un proceso que culminará con la finalización de todas las operaciones petroleras en esta área protegida de Ecuador.