La apertura del evento, que se prolongará hasta mediados de septiembre de 2024, comenzó hoy con una celebración en la que más de 1,500 niños participaron en un acto religioso. El arzobispo de Quito, monseñor Alfredo Espinoza, lideró la ceremonia, transmitiendo un mensaje de fraternidad inspirado en las palabras del Papa Francisco como elemento esencial para sanar el mundo.
Para garantizar la seguridad, la Policía Nacional del Ecuador implementó un robusto operativo en los alrededores del parque Bicentenario de Quito durante el inicio del evento internacional.
De acuerdo con el informe del ECU-911, más de 12,500 personas asistieron al evento en Quito. Durante la jornada, se brindaron servicios médicos en 16 ocasiones y se reportó la detención de dos individuos por intento de robo en las cercanías del parque Bicentenario.
El comando de la zona 9 del Distrito Metropolitano de Quito lideró las acciones de seguridad antes, durante y después de la ceremonia religiosa. Se desplegaron más de 58 motocicletas, cuatro patrulleros, dos aeronaves y unidades móviles de atención ciudadana. Se aumentó la vigilancia en los alrededores del parque y en lugares clave como centros comerciales y estacionamientos cercanos.
Se implementó un estricto control en los accesos, prohibiendo la entrada de objetos considerados como potenciales amenazas para la seguridad, como armas blancas, mochilas grandes o paraguas puntiagudos. Además, la Policía brindó recomendaciones a los asistentes para actuar con precaución y solicitar asistencia ante cualquier emergencia al personal presente o al ECU-911.
Bajo el radiante sol de Quito, los participantes disfrutaron de este importante evento religioso que marca un momento significativo en la historia eclesiástica de Ecuador. Las medidas de seguridad estarán vigentes durante todo el desarrollo del evento, que concluirá en los próximos días.