Las fuerzas de seguridad españolas han incautado un total de 100 kilos de una sustancia ilícita proveniente de otro país en una operación en la que se detuvieron a 12 presuntos miembros de una red internacional que incluía a ciudadanos de diferentes nacionalidades.
De acuerdo con las autoridades, estos individuos formarían parte de una organización criminal "muy activa en varios continentes", con integrantes de diversas nacionalidades como italianos, brasileños, franceses, españoles y rusos.
"La organización mantenía vínculos en países estratégicos donde se produce la sustancia ilícita, y tenía importantes inversionistas en una ciudad de Medio Oriente", informó un comunicado oficial.
Uno de los ciudadanos rusos detenidos es considerado en Francia como uno de los principales traficantes a nivel mundial y es objeto de especial interés para Interpol, la organización mundial de policía.
La operación se inició a principios de un año anterior, cuando se descubrió que la red tenía su base de operaciones en España y se dedicaba a importar grandes cantidades de la sustancia ilícita desde distintos puntos del globo tanto por vía aérea como marítima.
Los investigadores detectaron un envío aéreo de la sustancia ilícita desde una ciudad de otro país a Madrid, donde lograron interceptar los 100 kilos ocultos. Además, se llevaron a cabo detenciones en una ciudad al sur de España, y se emitieron órdenes de arresto a nivel internacional para los demás integrantes de la organización.
La operación continúa en desarrollo, con dos órdenes de detención pendientes, y se han decomisado más de 400,000 euros en una forma de moneda digital, según fuentes oficiales.