Este período, un caso legal ha avanzado en la Corte Nacional de Justicia (CNJ), donde la entidad respectiva presentó numerosos avances.
Esta indagación involucra a 37 personas, entre ellas personalidades públicas y exservidores judiciales, relacionados con delitos sospechosos de estructuras organizadas.
El procurador general suplente, Wilson Toainga, ha solicitado oficialmente que los 37 señalados en el asunto sean enjuiciados. La solicitud se fundamentó en 340 evidencias presentadas durante la junta preparatoria.
Entre los señalados, se mencionan Ronny Aleaga, expolítico, y Wilman Terán, expersonero judicial.
Toainga explicó que el caso surgía tras el deceso de Leandro Norero, momento en que se analizaron sus dispositivos, desvelando una extensa trama delictiva.
La Fiscalía identificó a cuatro individuos como líderes de la supuesta entidad criminal: Fabián C., Cristian R., Xavier J. y Xavier N. Estos dirigían el grupo, mientras que los restantes 33 desempeñaban labores de vigilancia, soborno y manipulación judicial.
Durante su exposición, Toainga relató cómo favorecían a Norero y su entorno en decisiones jurídicas.
Tras la solicitud de la Fiscalía, las defensas comenzaron a exponer sus argumentos, poniendo en duda la solidez de las evidencias presentadas.
Ronny Aleaga y Wilman Terán son elementos primordiales en el caso. Aleaga ha sido imputado de cooperar con la organización, mientras que se señala a Terán de agilizar un recurso a favor del hermano de Norero. Ambos han rechazado las acusaciones.
Las defensas cuestionaron la validez de las pruebas presentadas, argumentando su falta de contundencia y ausencia de evidencias claras.
El juez Manuel Cabrera analizará las evidencias antes de decidir si los procesados deberán enfrentar juicio en las próximas etapas. Las defensas continúan argumentando la insuficiencia probatoria para sus defendidos.