Las autoridades de Salud Pública del Líbano confirmaron el trágico saldo de nueve fallecidos y más de 300 heridos debido a las explosiones recientes en la nación. Las tareas de rescate han estado en marcha con intensidad.
El Centro de Operaciones de Emergencia del gobierno informó que la evacuación de los heridos en ambulancias está cerca de completarse. Además, el primer ministro libanés, Najib Mikati, indicó que la cantidad de personas llegando a los hospitales ha descendido.
Los estallidos generaron incendios en diversos edificios y vehículos en distintas áreas del país, como en el Valle de la Bekaa, el sur del Líbano y los suburbios de Beirut. Se han reportado daños materiales considerables en viviendas, locales y automóviles.
Estas explosiones se produjeron en zonas controladas por Hizbulá, un grupo chií libanés, y ocurrieron poco después de otro suceso similar atribuido a Israel, que también dejó múltiples víctimas.